La Vela (Salamba Sarvangasana)

La falta de tiempo y el querer hacer unas ilustraciones como si fuera otra persona, han hecho que tardara en contar más cositas por aquí, pero yo no soy dibujante, ni pintotra, ni ilustradora, eso no quita para que con unos dibujillos hechos con todo el cariño del mundo os enseñe asanas que podéis practicar con los peques, así que, vamos allá.

¿Estáis preparados?, porque nos vamos de viaje... si, de viaje, ya lo anuncié en Facebook; vamos a subir a un velero y vamos a surcar las aguas, balanceándonos con las olas y sintiendo la brisa en nuestra cara. Pero también vamos a cambiar un poquito nuestra perspectiva, porque ¿habéis escuchado alguna vez eso de "el mundo al revés"?, seguro que si, pues a poner la cabeza en los pies se ha dicho ;^D.

Que ¿dónde están los veleros?, pues aquí mismo, vosotros sois la Vela y sólo falta poner en marcha la imaginación. Tal vez tengáis un grumete que otea el horizonte en busca de "tieeeeerraaaa a la vistaaaaaa", o bien prefiere ser también un pequeño velerito surcado los mares. Pero ojo, nada de mantener la postura. Todo forma parte de un juego en el que además de beneficiarse por partida doble (juego y yoga), aprenden las asanas. Además, ellos son niños y como tales, no tienen nuestro sistema óseo ni muscular, y aunque tal vez les encante, se hace un momentito y ya a cambiar y a jugar a que os habéis lanzado al agua para daros un bañito ¿si?.

La Vela es una asana o postura invertida que nos ayuda a cambiar la forma en que miramos nuestro alrededor. Como postura invertida, oxigena la parte superior de nuestro cuerpo puesto que, tenemos a nuestro favor la fuerza de la gravedad y la circulación de retorno lo tiene más fácil. Por tanto, refresca la mente, alivia el estrés, el insomnio y la fatiga. Fortalece la parte alta del cuerpo, el pecho, los hombros y el cuello. Tonifica piernas. Mejora la digestión y claro está, la circulación de la sangre.

La forma de llevarla a cabo: Nos acostamos de espaldas y levantamos las piernas llevándolas arriba y un poco atrás. Si nos cuesta, nos podemos ayudar con un poco impulso. Ponemos las manos en la espalda o caderas y los codos bien colocaditos y anclados en el suelo. Podemos mantener un par de respiraciones observando cómo cambia la misma en esta posición. Para bajar, primero encogeremos las piernas formando un rulito o como decía el otro día mi profesora, "como un bicho bola", jajaja, para después ir bajando poco a poco apoyando primero la espalda en el suelo.

Y ahora, nada de levantarse corriendo, decidle a los peques que se pongan a nadar, porque un bañito en el mar con un velero a la espera, no tiene desperdicio.

Namasté!.

Mi Guerrero ♥

Ando un poco de cabeza últimamente (y no porque esté haciendo una postura invertida, jejeje) y sin demasiado tiempo... o más bien, con muchas cosas que hacer y por tanto no doy de mí.

He querido pasar para comentaros que si no conseguís hacer Yoga con vuestros peques, no desistáis, ni desesperéis, que van a rachas, y no sois los únicos. Pero como os digo, es más fácil que os pongáis a hacer vosotros y que os sigan que se proponga y estén en ese momento por la labor. Todo depende de la edad, de si ya practica Yoga, etc.

Mi Cucolinet de carne y hueso parece que no está mucho por la labor, pero siempre le encanta mostrarme su asana favorita: El Guerrero. Así que con mi otra vena fotográfica, aquí os muestro a Mi Guerrero ♥.

¿Y si preparáis cámara y os ponéis a hacer alguna Asana?, si os siguen y entra en juego la cámara (una compacta y en función de su edad, se la dejáis, o con el móvil mismo...) y que os saquen también fotos a vosotros. Seguro que pasáis unos momentos muy divertidos.

El Gato (Marjara)

Llegó Septiembre y es momento de desesperezarse, estirar todos nuestros músculos, sacudirnos ese letarguillo del calor y del verano y ponernos en marcha.

He tenido la inmensa suerte de poder hacer Yoga estos meses de Julio y Agosto al aire libre, en un parque, rodeada de un grupo de personas geniales y todos encantados de disfrutar de césped, árboles, brisa... una gozada vamos. Y ahora entramos en la etapa del inicio del cole y de vuelta a nuestro Yoga en casa con mi Cucolinet y mis Cucos ;^D.

Para comenzar, vamos a estirarnos y flexibilizarnos como lindos minimos, emulando a Piolín con su "creí ver a un lindo gatito". Así que vamos a jugar con los peques a ser mimosos gatitos y podemos bajar a su nivel, ponernos a cuatro patas, maullar, ronronear, pedir caricias (eso es lo mejor, jejeje). Pero también en el juego podemos pasearnos antes o después de estirarnos y gatear un poco que es muy sano y casi casi se nos habrá olvidado a los adultos. Los más peques, los que todavía gateen, seguro que se lo pasan bomba al ver a su mamá o su papá gateando como ellos.

Una de las cosas que más llaman la atención de los gatos (aunque particularmente a mí me llaman la atención muuuuchas cosas), es como arquean su espalda, su columna, que en los animales también se denomina "raquis". ¡¡¡Tienen una flexibilidad impresionante!!!. Pues para hacer El Gato justo haremos eso, flexibilizar nuestra columna.  Y ¿cómo?, pues fijándonos en el gato, que cuando se enfada y se "estufarra" todo, jajaja, se arquea hacia arriba metiendo el ombligo y la cabeza (también cuando se pone muy cariñosón, que doy fe de ello con mi gato). Y después también cuando se estira, hace lo contrario, mete el lomo hacia adentro, llevando el ombligo al suelo y levantando la cabecita y la colita.

Pero vamos a ir poco a poco y paso a paso:

Nos ponemos a gatas con rodillas y manos en el suelo. Manos separadas el ancho de los hombros y rodillas separadas el ancho de las caderas. Espalda recta.

Cuando tomamos aire, curvamos la espalda llevando el ombligo al suelo y levantando el culete y y la cabeza.

Al expulsar el aire y muy despacio, levantamos hacia arriba como los gatos, metiendo la cabeza y el culete hacia abajo, como si quisiéramos juntar por debajo cabeza y culete, jejeje.

Todo esto se hará muuuuuuy lentamente porque nos estamos estirando disfrutando de ese estiramiento, como los gatitos. Además debemos llevarlo con la respiración, como todo en Yoga ¿si? (ya sabéis que los peques irán más por libre, pero con el tiempo irán cogiendo todo esto y nos sorprenderán).

Para ilustrar un poquito, pues ya sabéis, he hecho un dibujito con mis Cucos, pero también se coló un lindo gatito y la mamá Cuco le está "parando los pies" porque no sabe exactamente cuáles son sus intenciones; y mientras Cucolinet termina con sus estiramientos gatunos, ella está ojo avizor, como la gran madraza que es.

En cuanto a los beneficios pues, flexibilizar la columna sin lugar a dudas, además de aumentar la circulación sanguínea, relajar el corazoncito y alinear los órganos de nuestro cuerpo que con estos suaves movimientos y estiramientos se van haciendo más cómodo su huequito.

El Indio o Postura fácil

¿Os acordáis de cuando os hablaba de La Montaña?, pues ésta también es una postura básica. El Indio puede ser un inicio para una clase de Yoga y podemos aprovecharla para centrarnos en nuestra respiración tomando aire por la nariz y expulsándolo también por ella: utilizando nuestro diafragma, de forma que nuestra barriga se convierte en un globo y cuando el aire entra, la barriga se hincha como si estuviera llenándose el globo y después al salir el aire, ésta se deshincha hasta que no queda nada de aire.

Con los peques podemos imaginar que somos una roca gigante, que pesa muuucho y que no nos podemos mover; o bien somos un indio, como por ejemplo... Toro sentado, un indio fueeerte, pero también tranquilote y bonachón que está mirando la hoguera encendida delante de él y de la que está tomando calorcito o bien está vigilando comida que se está haciendo lentamente en el fuego.

Mientras estamos realizando la Asana, si estamos tranquilos, podemos aprovechar para vaciar la mente alejando pensamientos, centrándonos en la respiración y sintiendo y descubriendo cómo está nuestro cuerpo, las sensaciones que percibimos... cómo está nuestra espalda, si notamos tensión en los hombros, la nuca, qué partes están en contacto con el suelo, etc... podemos también decirles esto a los peques, preguntarles, para ayudarles a que descubran su cuerpo y sus sensaciones poco a poco.

¿Cómo debemos adoptar esta postura?, pues sentándonos en el suelo o sobre un cojín, por ejemplo, con las piernas cruzadas. Espalda recta, como si nos estuvieran tirando de un hilito que estuviera en nuestra cabeza (como una marioneta). Hacemos rodar los hombros hacia atrás, de forma que se abra el pecho y apretamos un poquitín el ombligo. Podemos cerrar los ojos y relajar todo el cuerpo. Podríamos juntar las palmas de las manos al pecho (y podríamos entonar un OM) o dejarlas boca arriba suavemente apoyadas sobre las rodillas, juntando nuestros dedos pulgar e índice (el gordete y el que señala a todas partes X^D).

Es una postura genial para la meditación (si se quiere practicar), ya que nos ayuda a preparar cuerpo y mente para iniciar una práctica de Yoga. Relaja nuestro cuerpo, elimina nerviosismo y ansiedad y nos ayuda a centrar nuestra atención en la respiración.

Saludo al Sol

Ya hemos llegado... siiii, después de todas las entradas que hemos ido viendo hasta ahora con las Asanas, hoy podemos realizar completa la variación del Saludo al Sol que quería enseñaros. Para ello he preparado dos cositas: un mosaico y un pequeño vídeo en la que van pasando las Asanas poco a poco (no esperéis gran cosa ehhh ;^), la intención es lo que cuenta =^D).

Vamos primero con la Mosaico donde he reunido todas las Asanas y veréis que el orden está "duplicado", y tiene un motivo: en la primera vuelta, la pierna que irá hacia atrás para hacer El Guerrero, será la pierna derecha y con ella volveremos también; y cuando hagamos la segunda vuelta, lo haremos con la pierna izquierda y volveremos con la pierna izquierda ¿si?. De todas formas en el Mosaico he puesto en cada dibujo del Guerrero, la pierna correspondiente, porque al principio es un lío.

A tener en cuenta, cuando nos levántemos desde la Inclinación hacia adelante o Uttanasana hasta La Montaña elevada o variación II, lo haremos con los brazos ya hacia arriba y la espalda recta, con lo que sacaremos el culete en plan "flecha que apunta con el culete hacia un lado y las manos hacia otro".

Ahora vamos con el vídeo, que no es más que los mismos dibujos de arriba:

Recordad siempre que aquí estamos intentando hacer Yoga con los peques y que no importa cómo se haga, lo importante es que reconozcan las Asanas y que las realicen jugando y divirtiéndose. Haced tooooodas las monerías, sonidos, saltos que se os ocurran, que ellos se rían y disfruten con vosotros. Sacad a vuestro/a niño/a interior, que si no tiene muchas oportunidades de salir, seguro que se lo pasa pipa, aunque al principio esté un poco "oxidado" ¿vale?.

Si esta variación del Saludo al Sol os parece muy larga, podéis hacer la que enseña Federico González en su vídeo (pinchando vais a la entrada), aunque aviso que tal vez a vuestro/a peque le pase como al mío y es que le encanta hacer El Guerrero =^D.

Espero que os haya gustado la recopilación, la he hecho con mucho cariño y esperando disfrutéis de la misma. Ya me contaréis qué tal.

Hasta la próxima Asana o Entrada.

Namaste!.

El Perro, la V invertida o Mukha Svanasana

Ésta es la última Asana para completar la variación del Saludo al Sol que os quería enseñar. El orden no es exactamente el mismo en el que han ido saliendo las Asanas, porque tuve un pequeño lapsus, pero como haré una entrada para hablar del saludo a nuestro astro rey, explicaré cómo es el orden a seguir y veréis cómo es sencillo.

Ahora vamos a pasar de La Tabla a ser simpáticos Perritos. Podemos elegir ser pequeños y vivarachos, o graaaaandes y tranquilotes. Podremos ladrar, sacar la lengua y jadear de contentos, mover el rabito e incluso rascarnos con una de nuestras extremidades traseras, todo lo que se nos ocurra. Recordar que con peques muy peques, lo importante no es cuán hagan de bien la Asana, sino que disfruten, que se diviertan y se familiaricen con la Asana y con la equivalencia en el animal al que se emula por ejemplo.

Veamos más o menos cómo sería de la mano como siempre de mis Cucos con un dibujillo. Ahhhh también se puede hacer otra cosa cuando nos convertimos en perros y es levantar la patita para hacer pis, que justo es lo que se puso a hacer mi Cucolinet, jajaja.

Desde la Asana de La Tabla, levantaremos el culete, nos estiraremos. En lugar de levantar directamente el culete hacia el cielo, también podemos ponernos de rodillas y desde ahí, estirando bien la columa y con la cabeza y brazos siguiendo la misma línea que la misma, elevar entonces el pompis. Una vez que elevamos, quedaría como una "V" invertida. Las piernas habrá que procurar que estén rectas al igual que nuestra espalda. Empujaremos queriendo mirarnos bien el ombligo para estirarnos bien.

Esta Asana, ayuda a relajar la mente y a aliviar el estrés. También nos aporta energía. Podemos englobarla dentro de las posturas invertidas, por lo que es rejuvenecedora, ya que aumenta la circulación de sangre en el cerebro. Debemos recordar que nuestra circulación de retorno al corazón, debe superar la fuerza de la gravedad, por lo que con las posturas invertidas o semi invertidas, ayudamos a este retorno con todas las ventajas que ello supone llevando mayor oxigenación a las zonas altas. En esta Asana también se estiran hombros, pantorrillas, arcos de los pies, manos, espalda y caderas... ¡¡¡madre del amor hermoso cuántos beneficios sólo por ponernos a cuatro patas como nuestros amigos canes!!!, jajaja, así que, a ladrar un poco se ha dicho ;^D.

En la próxima entrada pasaremos a ser Cobras (cuya entrada ya ha sido publicada)... si, si, como lo estáis leyendo, Cobras que se yerguen orgullosas y altivas; y para ello, haremos una transición de esta asana a la siguiente, siendo unos Caracolitos, pero como éstos en sí no son asana como tal, pues lo explicaré una vez os enseñe a esta serpiente SSSssssssSSSSSS (eso último intentaba ser el siseo de dicho reptil XD).

La Cobra (Bhujangasana)

Sin contar ésta, sólo nos queda una Asana más para completar el Saludo al Sol que os quería enseñar... si, si, de verdad, después será casi lo mismo pero hacia atrás, así que se podrá completar. Será el momento de haceros un collage con todas las ilustraciones para que podáis hacer el Saludo y de dar las explicaciones pertinentes en la entrada... pero no nos adelantemos y vamos ahora a convertirnos en serpientes...

Pero no seremos serpientes normalitas, nooooo, seremos señoras Cobra, que no sé si se le podrá considerar la reina o no de las mismas, pero puede ser una de las que más impresiones por colores y por ese despliegue de "poder" una vez que alza su cabeza y parte de su cuerpo del suelo.

¿Qué enseña a los niños esta Asana?, pues creo que enseña a ver las cosas desde distintas perspectivas, porque primero la Cobra está posada en el suelo y después, conforme toma poder, se va elevando y viendo el mundo desde otra perspectiva que ya no será a ras de suelo. Por tanto elevará pecho y cabeza y podrá hacer el siseo poderoso de esta serpiente.

Vamos a ver cuál es la posición con mis Cucolinets que ya tenían muchas ganas de volver a salir por aquí y andaban algo revueltos... tan, tan revueltos, que decidieron que ya no querían estar más en el suelo y que las Cobras también podían subir a los árboles y estar más cerca del cielo, así que, se han ido nuevamente a su árbol y nos lo enseñan desde una de sus ramas:

Si no llegamos o notamos cierta incomodidad en cuello o la zona de los riñones, nos elevaremos tanto y podremos dejar
nuestros codos pegados al suelo, como lo hacen Mamá Cuco y Cucolinet.

Para llegar hasta aquí, partíamos de El Perro, pues bien, para llegar a ser poderosas Cobras, vamos a arrastarnos un poquito como si fuésemos, por ejemplo, unos Caracolitos... así que llevaremos las rodillas al suelo y nos quedaremos como a gatas, como un Gatito y haciendo uso de nuestros poderosos brazos, acercaremos poco a poco nuestro pecho al suelo con el culete en pompa hasta estirar las piernas y aquí ya, elevaremos cabeza y tronco, para quedar elevados como la mejestuosa Cobra  :^).

También podremos hacerlo desde el suelo, si no queremos pasar por ese paso del Caracolito, con lo que bajaremos al suelo, con las manos apoyadas en el suelo conforme estábamos, a la altura de los hombros. Al tomar aire estiraremos los brazos y levantaremos cabeza, cuello y pecho, llevando los hombros hacia atrás y abajo (nada de juntarlos a las orejitas). Y aquí ya respirando, trataremos de estirar más los brazos y elevaremos más nuestra cabeza y pecho.

En cuanto a los beneficios de la postura: abre el pecho, fortalece y flexibiliza la columna, los brazos y la espalda. Ayuda en problemas de asma, ya que fortalece el diafragma. Mejora digestión. Y además nos ayuda a eliminar el estrés y la fatiga... vamos que como veis, la Cobra es toda una señora Asana, haciendo honor a su nombre.

Espero que os haya gustado y que hayáis tenido ocasión de practicar alguna Asana con los peques.

Namaste!.

La Tabla

¿Qué tal están vuestros pequeños guerreros y vuestras pequeñas amazonas?, os pregunto esto, porque justo eramos valientes guerreros en la entrada anterior.

Pues bien, ahora vamos a pasar a ser una Tabla, firme, fuerte... o bien, una cuesta o pendiente algo empinada que lleva a una montaña (creo que a todos los niños les hace mucha gracia eso de subir por una carretera empinada o similar), o también podemos ser un puentecito por donde pasa un río por abajo... cualquier cosa que consideréis que le/s va a gustar y a hacer gracia a vuestro/s peque/s.

Aquí tenéis como siempre a los Cucos enseñando cómo sería esta asana (con Cucolinet cotilleando a ver cómo lo hace mamá Cuco):

En esta postura se fortalecen brazos, pecho, hombros y espalda y la barriguita habrá que mantenerla con el ombliguito un poquito hacia adentro para que esa zona esté fuerte, así las abdominales también juegan un papel importante.

Tal vez a los peques les cueste realizarla... o tal vez no y os sorprendan, jajaja. En cualquier caso, ya sabéis que estamos jugando, nos estamos iniciando y que se van familiarizando con las posturas, así que tal vez estén con el culete en pompa, con las rodillas en el suelo, levantando una pierna... no importa, los papis haréis bien la postura y ellos, en su juego, tomarán buena nota mental y años más tarde, la harán muchísimo mejor que vosotros mismos, de eso podéis estar seguros ;^D.

Desde aquí pasaremos a ser simpáticos Perritos y podremos ladrar y todo, jejeje, seguro que a vuestros peques les encanta.

Namaste!.

Dibujos para colorear

Con motivo de los 100 seguidores en la recién estrenada página de Facebook y con el fin de que puedan participar los peques, que al fin y al cabo, son los protagonistas y a los que va dirigida principalmente este espacio, he querido realizar unos dibujillos para que se puedan imprimir y colorear.

Mis Cucolinets estaban super contentos y no paraban de revolotear, dar volteretas, canturrear, saltar... así que en un momentito, les he dibujado y he subido dos dibujos a dropbox para que se puedan descargar.

Estos son los dibujillos:

Para descargar desde Dropbox, pinchad AQUÍ

Para descargar desde Dropbox, pinchad AQUÍ

Después, si queréis, podéis subir los dibujos ya coloreados a la página de Facebook, o bien enviármelos al correo micucolinet@gmail.com y yo los subiré a la página.

Espero que os gusten.

Gracias a Todos!!! y Namaste!.

El Guerrero o Virabhadrasana

En la anterior asana nos quedamos saludando a la tierra y dando gracias por todo lo que nos aporta. Ahora, con todo el poder de la tierra, emerge el Guerreeero noble, fuerte y valiente y cuya labor consiste en mantener la paz entre todos los seres. Seguro que a los niños les encanta (puesto que son muy dados a emocionarse con super héroes... -os cuento un secreto, a mí me pirran los super héroes X^D-) y a las niñas, podemos decirles que son como heroicas amazonas ;^). También podemos plantearles de se imaginen que su esterilla es una tabla de surf, que cabalga sobre las olas y deben de guardar un buen y fuerte equilibrio para mantenerse, así tenemos más posibilidades, en función de lo que más les guste a nuestros peques o bien variando de una vez a otra para hacerlo más divertido.

En este caso vamos a ver una variante (puesto que hay varias formas de realizar esta asana) pero aquí hablaré de la que mi profesora me enseñó en el Saludo al Sol. El Guerrero les aportará fortaleza en piernas, espalda, hombros y brazos; y también abrirá pecho, pulmones estimulara músculos abdominales y aumentará circulación sanguínea y resistencia.

Vamos a ver cómo enseñan a los niños esta asana mi Cucos, que han decidido quedarse un poquito más en contacto con la tierra para hacer esta variante de rodillas. Allí también han encontrado algunos que otros amiguitos que andan observando o bien ocupados en sus propios asuntos...

Desde la postura anterior, ponemos las manos en el suelo y llevamos una de las piernas (podemos empezar por la derecha) muy atrás con todo el pie estirado y con la rodilla apoyada en el suelo. La pierna derecha, cuyo pie está en el suelo, quedará doblada por la rodilla y en ángulo recto. En este momento y antes de terminar con la asana, podemos decirle a los niños que tenemos una postura firme y fuerte como la de un gerruero, que estamos montado sobre la ola como surfistas o que estamos firmemente sentados en un caballo e incluso podemos hacer como que lanzamos una flecha con un arco como valientes amazonas. Después pasaremos a elevar nuestros brazos al cielo, juntando nuestras palmas y con los dedos apuntando nuevamente al sol, mirando nuestros deditos gordos en adoración al sol, como guerreros que le damos gracias por alumbrarnos para poder observar y ayudarnos a mantener la paz en la tierra.

En sánscrito esta postura recibe el nombre de Virabhadrasana y recibe su nombre de Virabhadra un legendario guerrero hindú. En misión casi divina debía luchar contra el ego para encontrar la humildad, según indica la leyenda.

Namaste!.

Saludando a la tierra o Uttanasana

En esta ocasión mis Cucos se me han revelado un poquito y es que me decían que querían bajar de su rama para saludar a la Tierra como ella se merece, querían estar en contacto con ella y no mirarla desde la rama, así que tomando precauciones por si aparecía algún lindo gatito por allí, allá que se han bajado ellos mientras una familia de escarabajitos paseaban y les miraban curiosos X^D.

Si recordáis nos quedamos en la segunda variación de La Montaña donde elevábamos nuestras manos y saludábamos al sol, pues ahora toca saludar a la Tierra, aquélla sobre la que vivimos, la que nos nutre.

Desde la postura anterior y con los pies juntos, tomaremos aire y expulsando doblaremos nuestro cuerpo desde las inglés; si no llegamos al suelo podemos hacer dos cosas:

- apoyarnos en un cojín, bloque o similar
- flexionar las rodillas para apoyarnos en el suelo y que nuestra espalda se estire

Desde este ángulo, miraremos nuestro ombligo.

Es una asana que se suele realizar al inicio de una clase, aunque aquí os recuerdo que os estaba enseñando las asanas que conforma el Saludo al Sol. Esta posición ayuda a cuerpo y cerebro a recuperarse de la fatiga. Viene genial para personas que se excitan fácilmente, puesto que calma nuestras células cerebrales. Tras la misma, los ojos adquieres viveza y la mente se encuentra más en calma. Tiene otros muchos beneficios, pero aquí estamos tratando sobre todo en ver cómo hacerlo con los peques.

Después de haber saludado al sol, podemos bajar a saludar a la tierra, moviendo nuestras manos en señal de saludo, acariciándola, etc. Debemos dejar también actuar a nuestra respiración y a la gravedad, aflojando los músculos para notar cómo nos vamos alargando más hacia la tierra.

La próxima será totalmente distinta, ya que hemos saludado a la Tierra, nos acercaremos más a ellas y adoptaremos... la postura del guerreeeeero ;^D.

Namaste!.

La Montaña (Variación II)

Lo prometido es deuda y aquí está la segunda variación de la asana de La Montaña. Como ya le tenemos confianza a la asana, para ir familiarizándonos, también os indico su nombre en sanscrito que es Tadasana ;^).

Si recordáis cuando vimos la primera vez la Montaaaaña (así, una muy grande), os indicaba que nos ayuda a estar centrados, tranquilos, derechos... Contactamos con la tierra y el cielo, sintiendo bajo nuestros pies la tierra y alargando la cabeza hacia el cielo. Es una postura en la que nos permite observar nuestro cuerpo y ser conscientes del mismo, ¿qué notamos en la planta de los pies?, ¿está repartido el peso?, por ejemplo.
Después tomábamos aire por la nariz... pero ojo, haciendo el globo eh!, que no valen trampas. ¿Y qué es eso del globo?, pues muy sencillo, debemos llenar nuestros pulmones dese la parte baja de los mismos utilizando el diafragma, que es un extenso y potente músculo del que no somos muy conscientes y debemos aprender a utilizar. Esto se traduce a que con la respiración no debemos hinchar el pecho cual palomas torcaces, no, no, no... debemos de hinchar nuestro estomaguito, como un globo, mientras el pecho debe quedarse quietito ¿si?.

Así que vamos donde nos habíamos quedado, tomamos aire por la nariz, y juntamos las manos en el pecho, palma con palma, los dedos apuntando hacia arriba (ésta sería la primera variación), expulsamos el aire lentamente por la nariz (en Yoga el aire entra y sale por la nariz siempre) y ahora vamos a la segunda variación que nos ocupa en esta entrada, la Montaaaaña elevada o Tadasana elevado, en donde, volviendo a tomar aire, alzamos nuestros brazos al cielo, estirándonos, como si de un hilito nos tirarán y miramos nuestros pulgares y expulsando el aire iríamos a la siguiente asana que seguiría en el Saludo al Sol.

Como aquí estamos viendo poco a poco las asanas, se pueden hacer un par de respiraciones lentas y conscientes en cada asana ¿si?.

También debemos recordar que en todo momento, debemos meter un poquitín el culete hacia adelante (con lo que bascularíamos la pelvis y alinearíamos la zona lumbar, y también debemos digamos... apretar un poquito la barriguita, como si metiéramos el ombliguito un poquito hacia adentro... ya sé, sé que así dicho y al principio parece un poco complicado, pero muy poquito a poco y con la práctica, lo haremos casi sin darnos cuenta, así mantenemos tono muscular en toda la zona de barriguita para que nuestras tripitas y demás, estén bien protegidas por nuestros músculos abdominales.

Os cuento que después de la carita de pillo que tenía Cucolinet en las dos asanas anteriores de la Montaña, y tras las respiraciones lentas y conscientes, aquí se ha centrado un poquito y está sintiendo cómo crece, elevando sus alitas al cielo. Ésta sería una buena forma de hacer de plantita cuando juguéis con los peques haciendo de semilla que va creciendo y creciendo, buscado la luz del sol y el cielo, para crecer y crecer y crecer, antes de desplegar sus ramas o sus hojas.

Éstas asanas que hemos visto, formarían el inicio y el final del Saludo al Sol, así que, ¡ya lleváis un buen trecho! ;^). En la siguiente asana que veremos, digamos que iríamos a saludar a la tierra, tras haber saludado en ésta al sol y al cielo.

Espero que os haya gustado. Le podéis ir poniendo una cancioncilla, que a los peques les encantará y les hará recordar las posturas siguiendo la cantinela y los animales, plantas y demás que vayan apareciendo, como hace Federico González en este vídeo. El Saludo al Sol que yo os iré enseñando, también es una variante e incluiremos alguna asana más de las que realiza Federico en su vídeo. Aquí tenéis la canción que canta mientras hace las asanas con los peques:

Entro en mi corazón

saludo al sol

saludo a la tierra

como un sapo que salta al agua

se arrastra como una serpiente

caminando sube a la montaña

me rasco, me rasco las pulgas

y el sapito vuelve a saltar 

adios a la tierra

adios al sol

y entro en mi corazón.

Namaste!.

La Montaña (variación I)

Ya os contaba en esta entrada que había pensado en enseñaros las asanas que forman el Saludo al Sol, así después, podréis ir pasando de una a otra para realizar está dinámica.

El inicio está compuesto por 3 variaciones de La Montaña, ¿la recordáis?, una postura fácil, sencilla, la base para asentarnos en la tierra y arraigarnos, notar cómo nuestros pies apoyan y nos conectan a la misma.

Pues bien, para iniciar el Saludo al Sol, vamos de la mano de mis Cucolinets que andan la mar de revueltos, super contentos, porque están viendo que les presto mucha atención y que intento dibujarlos, así que encantadísimos y muy dispuestos ellos =^D.

Partiendo de la posición de La Montaña con los brazos extendidos hacia abajo y al lado del cuerpo, tomamos aire, para llevar nuestras manos a la altura del pecho, palma con palma y con las puntas de los dedos apuntando hacia el cielo y expulsamos poco a poco el aire por la nariz. La mirada hacia adelante.

Como veis es algo muy sencillito, así poquito a poco, iremos viendo todas las partes. A los peques les suele hacer mucha gracia y después se ponen super serios y "muy en el papel", jajaja, si además se lo enseñáis diciendo "Namaste!" como saludo, les hará más gracia aún y casi lo harán en tono ceremonioso ;^).

La próxima entrada, será con la segunda variación de La Montaña.

Namaste!.

Unos consejitos...

...a tener muy en cuenta.

He querido hacer un dibujillo del Cucolinet señalando esta lista de cositas a apuntar para la práctica y animando a comenzar con ella:

Sólo se descubre qué es el yoga practicándolo.

Nada de hacer yoga después de comer con la barrigota llena, mucho mejor antes o bien esperar un par de horitas para ponerse a ello.

Utiliza ropa cómoda, un cojín, una esterilla o manta doblada en 2 ó 3, estar descalzo o bien con calcetines (esta parte seguro que les encanta a los peques, jejeje, el mío no hay forma de que lleve unas zapatillas puestas en casa X^D) y tener a mano algo para taparse por si se da el caso de llegar a hacer unos minutitos de relajación, puesto que la temperatura corporal, disminuye.

Mejor practicar un poquitín todos los días, que mucho un día a la semana. Aunque sean diez minutillos locos. Se crea un hábito, una rutina y después el cuerpo, la mente y el espíritu nos lo pedirán y estaremos pletóricos tras ello. Si no es posible, pues dos o tres veces a la semana.

No te compares con nadie, absolutamente NADIE, sólo con uno mismo/a. El Yoga nos ayuda a conocer mejor nuestro cuerpo y a reconocer nuestros límites. A ser respetuosos con él. Compárate sólo contigo mismo/a, verás tus progresos en la práctica, tanto física, mental y espiritual y esto te hará muy feliz ^_^.

No fuerces las posturas, llega hasta donde tu cuerpo te permita... una vez ahí, relájate, respira en la asana... el cuerpo se irá "aflojando", relajando y todavía llegará un pelín más, pero sin forzar.

Sé bueno contigo mismo/a, y esto tiene que ver un poco con el punto anterior. Confía en tí, en tu cuerpo. El Yoga también te ayudará a tener más resistencia, equilibrio (en todos los sentidos), flexibilidad, confianza, tolerancia, calma, paz...

Disfruta de la práctica con tu peque o tus peques (si eres padre o madre), saca a tu niño/a interior (tantas veces encerrado/a en algún rinconcito oscuro), juega, ríe, achucha y besa a tu chiquitín. Lo importante es familiarizarse, crear un hábito, disfrutar... si haces el árbol, cuéntale un cuento, haced entre los dos un hoyo para plantar una semilla, tapad después el agujero, regad con cariño o haced una danza de la lluvia para que descargue sobre ella, llamad al sol para que ilumine y dé calorcito con sus rayos y convertiros en esa semillita que comienza a crecer y a estirarse en busca de esas nubes y de ese sol que le ayudaron a convertirse en un gran árbol, agitad las ramas y por fin, realizad la asana. Os puedo asegurar que es muy divertido.

Hasta aquí, de momento, llegan estos consejillos que espero os sirvan. Dado que comencé con la asana de la montaña, he pensado en crear entradas de las asanas que configuran el Saludo al Sol, así, cuando ya conozcáis todas ellas, podréis enlazarlas para poner en práctica esta dinámica que despertará mucha energía en vuestro cuerpo.

Sin más, me despido hasta la próxima entrada y os deseo buena y feliz práctica.

Namaste!.

Y los papás ¿por dónde empezamos?

Todos sabemos que los niños tienden a hacer lo que ven, por tanto es muy importante predicar con el ejemplo para todo. Vocabulario, alimentación, juegos, actitudes con la familia... utilizarán las palabras y las frases que nos oigan (por ello es importante mantener digamos... una higiene linguística, evitando palabras malsonantes, soeces, etc.); será más fácil que coman frutas y verduras si son platos habituales en casa y los come toda la familia; también podremos contribuir a juegos más pacíficos y educativos si seleccionamos los dibujos que ven en TV, si nos implicamos en juegos educativos, manualidades...; por último, en cuanto a lo que me he referido anteriormente, si en casa somos cariñosos y nos demostramos nuestro amor, los niños podrán ser mucho más mimosos y buscarán contacto, abrazos y besos, al igual que los prodigarán.

Pues bien, muchas personas no iniciadas en el yoga y entre ellos habrán muchas mamás y muchos papás, se preguntan cómo pueden iniciar a un niño en el yoga si ellos no practican, si no les pueden guiar. Veamos, atendiendo a alguna que otra preguntilla al respecto que he recibido, he buscado y aquí tenéis algunos vídeos que pueden estar muy bien para familiarizarse e iniciarse.

A tener en cuenta: no os pongáis a ver los vídeos sin más, buscad un momento tranquilo del día (si tenéis niños y están en etapa escolar, la mañana puede ser perfecta), mente abierta, buscando relajarse y hacer las cosas con tranquilidad y respirando conscientemente, ropa cómoda, una esterilla/colchoneta (si no tenéis pues una alfombra gordita o una manta doblada en dos o tres), algún cojín, un chal, pareo o similar (o mantita si en vuestra zona hace más bien fresquete) y  hecha la digestión (nada de recién comidos).

En este vídeo hay una parte en la que explican qué es el yoga y en qué nos beneficia. Seguido de calentamiento y chi kung que a través de movimientos suaves y respiración busca "mover" la energía de nuestro cuerpo y conectar con nuestro espíritu. Sería la primera parte de la "clase", pero en youtube sólo he encontrado esta parte y por mucho que he buscado y leído comentarios de gente que también lo buscaba, no lo he encontrado, pero bueno... En el segundo fragmento iríamos a la práctica de algunas asanas de yoga y a la relajación, pero ya digo, llevo tiempo buscándolo y sin éxito. En casa tengo el DVD original y por eso sé cómo es. A pesar de que no es un vídeo para peques, con él he hecho yoga con mi hijo de 3 años muchas veces porque además es él quien lo pide =^D.

En este otro vídeo, suuuper relajante (ya que de fondo está el mar) se ve una clase completa y perfecta para iniciarse y/o para relajarse de tensiones, preocupaciones, nervios..., una delicia vamos.

Para finalizar un vídeo que comienza con el Saludo al Sol y en donde nos van guiando muy bien y poco a poco con profesora y modelo/practicante y que termina con una parte guiada de relajación. Otra joyita ;^D.

Creo que con estos tenéis bastante para familizaros, iniciaros y comenzar a notar de inmediato los efectos benéficos del yoga. Tal vez, cuando los peques lleguen del cole, os noten mucho más relajados/as y vosotros/as también os sintáis así y afrontéis la rutina con mente más positiva y tranquila.

Me encantaría que después paséis por aquí y me digáis si habéis puesto en práctica alguno y cómo os ha ido, ¿os parece?.

Namaste!.

Asana: La Montaña

Tengo intención de ir haciendo entradas de asanas de Yoga (entre otras cosas). Mi idea es hablar de ellas e ilustrarlas un poquito con algún dibujillo realizado por mí y con las figuras de Mi Cucolinet, donde comenzó todo; así Mamá Cuco y Cucolinet realizarán Yoga juntos. No es que sea una gran dibujante, pero me gusta, y no hay nada mejor que hacer las cosas que a uno/a le gustan y le hacen sentir bien, así que, también comenzamos con mis dibujillos en esta entrada. Hablaremos así, de la mano de mis Cucos, de las que sean más fáciles o recomendables para peques y he querido comenzar con La Montaaaaaña, y ¿por qué lo digo así, alargando la "a"?, jejeje, pues porque así se da la sensación de esa inmensidad que le caracteriza, de esa gran mole de tierra, piedras, roca... y a los niños, les encanta.

Habrá alguna persona no familiariza con el Yoga y que verá en qué consiste la asana y pensará que no se está haciendo nada, pero esto es infundado ;^). Hay que tener en cuenta que una de las cosas que aprendemos con esta técnica milenaria es a ser mucho, pero que muchísimo más conscientes de nuestro cuerpo y en La Montaña podemos ser conscientes de muchas cosas... vamos a ver en qué consiste:

La postura o asana de La Montaña es la principal en Yoga, nos ayuda a estar centrados, tranquilos, derechos... Se conecta de esta forma con la tierra y el cielo, sintiendo bajo nuestros pies la tierra y alzando, alargando la cabeza hacia el cielo. Los niños, con el tiempo, serán los que mejor harán de montañas, porque imaginarán perfectamente que lo son y se podrán visualizar como montaña cubierta de nieve, abarrotada de árboles, inexpugnable y toda roca...

¿Y qué hay que hacer cuando uno hace de Montaña?, pues nos ponemos de pie y derechos, con los pies paralelos y abierto a la altura de las caderas y los brazos caen relajados a los lados del cuerpo. Podemos hacer rodar los hombros hacia atrás, para que queden relajados y el pecho quede abierto, les diremos que metan un poquito el ombliguito hacia adentro y que no saquen el culito, más bien, que también lo lleven un pelín hacia adelante, para alinear la columna vertebral. La cabeza mirando al frente y bajando la naricilla como un dedito para alinear también la nuca. Cerramos los ojos y nos vemos firmes como una graaaaan Montaña. Y mantenemos la postura de 2 a 5 respiraciones, en función de la edad de los peques.

Y con esa gran imaginación de los niños ¡bendita sea!, podrán convertirse en Montaña en cualquier momento y lugar, en la cola del super o de una tienda, esperando para cruzar una calle o jugando con sus amigos, por ejemplo.

Espero que os haya gustado esta primera entrada dedicada a las asanas de Yoga para peques =^D. ¿Qué tipo de montaña vais a ser vosotros con vuestros chiquis?.

Namaste!.

Yoga y juego

Los niños aprenden jugando, como los cachorros del resto de seres vivos; por tanto, no podemos esperar realizar el mismo tipo de sesiones de Yoga que haríamos de otra forma. Está claro que cuanto más pequeños sean, más juego tendrán las sesiones y más cortas serán, pero les ayudarán a familiarizarse con esta práctica y les reportará beneficios: fuerza, flexibilidad, equilibrio, pero también aprenderán poco a poco a relajarse y a controlar más su cuerpo.

Las posturas o asanas se mantendrán durante dos respiraciones completas (inspiración y expiración) o incluso una, en función de la edad y de lo activos que sean. Las sesiones, como he dicho, cortitas y muy variadas, enfocado todo al juego. De esta forma, les enseñaremos como hace un perro, un león, un gato, una flor, etc.

En este enlace podéis ver un vídeo de una entrevista a una profesora de yoga para niños, hablando de sus beneficios, de cómo debe enfocarse e incluso hay una pequeña demostración con niños (se ejecutará el Real Player).

En este otro vídeo, se puede ver una pequeña muestra de cómo enfocar una sesión de Yoga para peques y estos son muuuy peques: una "marioneta", juegos y canciones. Lo que más me gustó es la canción con la que realiza y enseña el Saludo al Sol, me ha encantado... creo que me la voy a aprender para hacerlo con mi Cucolinet.

A veces los niños, si son muy peques, pueden confundir o no conocer algún animal, así que otra cosita chula, es hacerse con animales de juguete, de plástico, peluches... pequeños, no tienen  porque ser grandes, meterlos en un saquito de tela o similar y sacarlos cuando se vaya a realizar una de las posturas que estén basadas en un animal. Cada uno puede meter y la mano y ver qué animal le corresponde y también se puede jugar a que uno de ellos o bien el padre/la madre o instructor, tiene una varita  le convierte en el animal . Además, se puede acompañar dicha postura con mímica, sonidos... como ejemplo, cuando en casa hacemos el gato, maullo y ronroneo, jejeje. 

Aprovechad para jugar con vuestros peques, cualquier excusa es buena ;^).

Namaste!.

Vídeo para los peques

Para iniciar este pequeño nuevo espacio (como os contaba aquí, he querido compartir un vídeo que ví hace tiempo. Un vídeo para los peques en donde un gato les cuenta qué es el Yoga y para qué sirve. Realizado en dibujos animados, les encanta a los peques y puede ser el inicio del despertar a la técnica milenaria que les podrá reportar tantísimos beneficios.

Las primeras veces que se vió el vídeo en casa, nuestro Cucolinet quedó embobado y después pedía hacer "ayoga" (según él, jajaja), con el gato y con las vacas.

Espero que lo disfrutéis.

Namaste!.